miércoles, 18 de julio de 2018

Diez años en Vailima






Asumo desde ya la superstición popular que dice que celebrar un aniversario antes de tiempo bien puede traer mala suerte. El próximo 18 de Septiembre se cumplirán 10 años del arranque de este blog pero, por motivos personales, el que esto suscribe no estará operativo ese día para poder celebrarlo en tiempo real. Aprovechando esa indisponibilidad –que tampoco es excusa: bien podría dejar programada para entonces esta entrada, u otra muy similar, así como las subsiguientes- y la cada vez más creciente sospecha de que la página necesita un descanso –quiastos desde este preciso momento y similar a esta- y la sospecha de que la pén sabe si eterno-, he decidido adelantar los fastos a este preciso momento. En los últimos tiempos pensé diferentes maneras de festejar el acontecimiento, y finalmente me he decidido por hacer un desglose de mis discos favoritos publicados en el periodo que va desde la actualización de la primera entrada hasta el presente. Intentaré hacerlo en el menor número de posts posible –aunque son unos cuantos álbumes- para no estirar demasiado la excusa y porque a medida que vayan avanzando las próximas semanas dejaré de tener tiempo para dedicarlo al blog. Será una lista –algo casi inédito en mí: creo que hace como veinte años que confeccioné la última de similares características- dedicada según mi criterio a lo más destacado que me ha llegado en este decenio especial, en riguroso orden alfabético –jerarquías las justas- donde viene también agregada y mezclada una pequeña colección de recopilatorios y rescates que, entiendo, tienen un valor similar al de la pura actualidad: material inédito para mí que merece estar presente, entre otras cosas, por su revelación.




Advierto desde el principio que se trata de un listado muy personal –nada que ver contigo, con aquella o con el medio de más allá, que es de lo que se trata- basado en la curiosidad, la investigación o el diletantismo, pero sobre todo en el amor por las canciones pop y sus melodías, ya sean horteras o decadentes, refinadas o esplendorosas: por encima de todo sexys y fantásticas. Los que hayan leído mis reseñas musicales aquí o en páginas como Música en la Mochila o Canino ya tienen por adelantado bastantes pistas de lo que se avecina…

Repasando la selección y a modo de ligera reflexión, algunas predicciones a modo de flashes de cara al futuro más inmediato que, seguramente, necesitarían de un desarrollo más exhaustivo: extinción definitiva del concepto de pop (o rock) star al uso -más allá del decadente mercadeo de carnaza de dinosaurio en festivales masificados y convertidos en mero negocio especulativo-, imposibilidad de centrarse en carreras de largo recorrido (muy poca gente da ya la verdadera talla a este respecto, o la paciencia para apreciarlo no es la misma que antaño, y más teniendo en cuenta que se compite con una oferta tan apabullante), el recopilatorio como imperecedero compañero de descubrimientos y panorámicas, el progresivo predominio el ep como formato a seguir –en términos principalmente digitales, entre 5 y 8 canciones- en detrimento del álbum convencional que, si bien no desaparecerá del todo, terminará arrinconado quizá como simple regalo-fetiche para nostálgicos del vinilo: el oyente actual –y el venidero- ya no tiene ni tendrá la capacidad de atención para entregas de un grupo o artista determinados más largas que las de un (muy) pequeño puñado de piezas.

¡Brindo por haber llegado hasta aquí!



1 comentario:

Margarita dijo...

Felices 10 años en Vailima ♥️